Dos vinos muy ricos criados en condiciones extremas por menos de 20 euros: con la uva de moda y un elegido para la cena de los Nobel
Son vinos muy especiales, elaborados con uva que se cría en un terreno con condiciones extremas. Y son una maravilla, con una excelente relación calidad-precio pues no superan los 20 euros. Son Guímaro y Formiga de Vellut.
Si tú te crees la súper-heroína de tu vida por haber superado el verano con hijos y la no-conciliación tienes que ver como sufren algunas viñas. Es sabido que se necesita un poco de estrés para tener un mejor rendimiento pero en este caso son cepas hiper-estresadas que dan unos vinos únicos porque sus raíces han aprendido a sobrevivir.
La Ribeira Sacra es uno de los mayores exponentes de lo que mundialmente se conoce como “viticultura heroica”. Con este término se habla de cuando las condiciones del terreno son extremas, desafiando al vértigo de los bancales. Es donde la mecanización es imposible y esto en la vendimia pesa muchísimo.
Guímaro Ribeira Sacra
Un gran ejemplo es Guímaro que también nace de este terroir empinado en la sub-zona de Amandi, a unos 500 metros de altitud con diferentes suelos de pizarra, granito y arena. El corazón de la variedad godello es complementado por un 25% de treixadura, torrontés, loureiro y albariño. Es fresco sin madera, con notas a fruta blanca como la pera y la manzana. Este vino, procedente de una bodega familiar, tiene una acidez que hará que resista también el paso de los años.
Clos Galena Formiga de Vellut
Otra de las denominaciones más conocidas por este tipo de paisaje es la denominación de origen calificada Priorat. Formiga de Vellut de Clos Galena no solo es la historia de superación de Merche Dalmau, una de las grandes mujeres del vino, si no que también fue el vino escogido para la cena de los Nobel. Un cupaje de garnacha negra, cariñena y syrah. Con ocho meses en barrica de roble francés y americana sigue transmitiendo las notas minerales de la licorella. Esta pizarra oscura que aún atrae más el calor. Aún así no despuntan los grados alcohólicos porque hay un buen equilibrio de taninos sedosos y de una inteligente acidez por el contraste térmico.
Valle del Duero, Santorini, Mosela, Tenerife o Cinque Terre también son zonas increíbles que aún valoras más sus vinos cuando compruebas con pendientes de más del 80% como cuesta subir a podar. A estos vinos se le suman las condiciones climatológicas extremas, por ello, cuando ves lo que cuestan hacerse a través de su paisaje te parecen baratos. Unos vinos para recordarte la lucha de ser tu mejor versión en este principio de curso.
Artículo original para ELLE Gourmet
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